Mi pareja, el pequeño y yo nos sentimos muy acogidos y mimados. A nuestra llegada, teníamos todo lo disponible para hacernos una comida, tomarnos un v...
Read More...- ¡Estuvimos realmente a gusto y cuidados!
Mi pareja, el pequeño y yo nos sentimos muy acogidos y mimados. A nuestra llegada, teníamos todo lo disponible para hacernos una comida, tomarnos un vino y un buen café. Elena es un sol de mujer tanto en el trato como en los detalles. Nos dejó mucho más de lo necesario, tocadiscos incluido. Todo estaba limpio, ordenado y en su sitio. Nos rodeaba una gran calma y un grato silencio. Todo un detalle, especialmente cuando volvíamos cada día de hacer incontables kilómetros a pie por la caótica selva romana. La sala de estar era lo suficientemente amplia como para practicar Yoga por la mañana o pegarnos unos bailes antes de salir a dar una vuelta. San Lorenzo, el barrio en el que nos encontrábamos, tenía todo lo necesario como para hacer la compra, dar un paseo por sus calles, tomar unas cañas o ver un concierto en vivo. Algo que nos hizo sentir como en casa. ¡Mil gracias de nuevo Elena!
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